La preocupación por el uso de lentes de contacto ha aumentado desde la aparición de la COVID-19, sobre todo por la proliferación de información no contrastada acerca de este virus. Sin embargo, no hay evidencia científica de que el uso de las lentes de contacto podría contribuir a aumentar los riesgos de infección por coronavirus. Eso sí, sus usuarios deben tener en cuenta la necesidad de mantener una adecuada higiene y de extremar precauciones en cada uso, tanto al colocarlas como al retirarlas.
En este sentido, gracias a los procesos más actuales y avanzados en la elaboración de sus materiales y en las normativas de seguridad sanitaria que cumplen, los fabricantes se aseguran de que las lentes estén totalmente esterilizadas y libres de este tipo de posibles partículas infecciosas, por lo que el riesgo de que alguien se contagie de entrada a través de su uso es prácticamente imposible. Asimismo, si a esto se le suma una buena higiene por parte del usuario, la probabilidad de cualquier infección se reducirá drásticamente.
Las lentes de contacto siguen siendo una opción muy válida para compensar errores refractivos o de graduación. En este sentido, te recordamos 10 razones para que continúes decantándote por su uso:
1) No se empañan cuando hay cambios bruscos de temperatura. Además, en caso de lluvia, las gotas no dificultan ni entorpecen la visibilidad.
2) Son ideales para hacer deporte y actividades al aire libre, ya que se adaptan a cualquier movimiento, no se caen y las puedes utilizar en todas las prácticas garantizando un rendimiento óptimo del ejercicio.
3) El campo de visión es total. Al no existir interferencias de ningún tipo, como sería el caso de las monturas de las gafas, no se producen distorsiones y la percepción que tienes del entorno es real, garantizando incluso la visión de las zonas periféricas.
4) No provocan ningún cambio estético. Al mismo tiempo que compensan los problemas de refracción, las lentillas te permitirán mantener el mismo aspecto físico.
5) No interfieren en determinadas actividades. Por ejemplo, puedes escuchar música sin problemas, ya que no obstaculizan el uso de auriculares ni de otros elementos, utilizar gorra de manera más cómoda para protegerte del sol estival o el casco de la moto…
6) Son muy cómodas. Una vez que aprendes a ponértelas de manera correcta no notarás que las llevas puestas y se convertirá en un proceso rápido y sencillo. Recuerda no descuidar la higiene de tus manos para evitar riesgo de infección.
7) Libres de reflejos o distorsiones. Las lentes se adaptan perfectamente al movimiento de tus ojos por lo que no tendrás problemas ni notarás posibles reflejos ante una mayor incidencia de los rayos solares, como por ejemplo al conducir. De la misma manera, los colores se ven más brillantes y, por tanto, la nitidez es mucho mejor.
8) Permiten corregir casos de patologías corneales a través de la adaptación de unas lentes de contacto específicas. Además, existen lentillas con protección UV que protegen la córnea y la retina.
9) La variedad es inmensa y al poseer diferentes características, se adaptan a la mayoría de usuarios y condiciones visuales.
10) Ocupan muy poco espacio, por lo que si vas a viajar son una gran opción ya que no tendrás que preocuparte por lo que vas llevar en el neceser. Simplemente necesitas el portalentillas y el líquido para limpiarlas dependiendo de los días que vayas a permanecer fuera.
Recuerda! No es más probable infectarse por la COVID-19 a través del uso de lentes de contacto. Lo primordial es seguir las instrucciones de higiene adecuadas y no olvidar nunca realizar un buen lavado de manos.